La primera edición de la fiesta se festejó en mil novecientos noventa y seis, habida cuenta de que es en la localidad donde se hallan los últimos secaderos de congrio de la Costa da Morte, y por extensión de toda Galicia, un procedimiento de conservación tradicional, del también conocido con el nombre de anguiacho, y del que hay ya noticias en documentos de siglo XVIII. En esta celebración anual de exaltación de este producto que se celebra en el mes de abril coincidiendo con el Viernes Beato, se sirven alrededor de mil quinientos raciones de congrio que preparan en la cocina más de doce personas de las más distintas maneras: en empanada de trigo o bien maíz, en caldeirada, guisado, o a la plancha.
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